Errores comunes en la instalación de cerámica o azulejos

La instalación de cerámica o azulejos puede parecer una tarea sencilla, pero si no se realiza correctamente, puede terminar en un trabajo de mala calidad que afecte tanto la estética como la durabilidad del acabado. Los errores en la instalación no solo pueden ser visibles, sino que también pueden causar problemas a largo plazo, como desajustes o desprendimientos. Aquí te compartimos algunos de los errores más comunes que se cometen durante la instalación de cerámica o azulejos y cómo evitarlos.

1. No preparar adecuadamente la superficie

Uno de los errores más comunes es no preparar correctamente la superficie sobre la que se van a colocar los azulejos. Si la superficie no está nivelada, limpia o seca, los azulejos no se pegarán de manera adecuada, lo que podría provocar que se despeguen o se muevan con el tiempo.

¿Cómo evitarlo?

Limpia bien la superficie: Asegúrate de que la pared o el piso esté libre de polvo, grasa, o cualquier tipo de residuo que pueda impedir que el adhesivo se adhiera correctamente.

Nivelación: Utiliza una niveladora para asegurarte de que la superficie esté completamente plana. Si hay irregularidades importantes, como grietas o bultos, deberás repararlas antes de proceder.

2. Usar el adhesivo incorrecto

El adhesivo es un factor crucial en la instalación de cerámica. Usar el tipo incorrecto puede afectar la adherencia de los azulejos y hacer que se despeguen o se caigan con el tiempo.

¿Cómo evitarlo?

Selecciona el adhesivo adecuado: Asegúrate de elegir el adhesivo adecuado para el tipo de superficie (pared, piso, exterior, interior) y el tamaño de los azulejos. Algunos adhesivos están diseñados específicamente para azulejos grandes o para áreas húmedas, como baños o cocinas.

3. No dejar espacio para las juntas

Las juntas entre los azulejos son fundamentales para evitar que se agrieten con el tiempo. Un error común es colocar los azulejos muy cerca unos de otros, lo que puede generar fisuras y problemas de expansión debido a los cambios de temperatura y humedad.

¿Cómo evitarlo?

Utiliza separadores de juntas: Usa separadores de junta para asegurarte de que las líneas entre los azulejos sean uniformes. El espacio entre los azulejos debe estar determinado por el tamaño de las piezas y el tipo de acabado que desees.

Deja el espacio necesario: Generalmente, un espacio de 2 mm a 5 mm entre azulejos es adecuado, pero puede variar dependiendo del tipo de cerámica y del acabado que se elija.

4. No aplicar suficiente adhesivo

Aplicar demasiado poco adhesivo en la superficie o en el reverso de los azulejos puede hacer que no se adhieran correctamente. Esto puede resultar en azulejos que se muevan o se despeguen con el tiempo.

¿Cómo evitarlo?

Aplica una capa uniforme: Usa una llana dentada para aplicar una capa uniforme de adhesivo en la superficie. La cantidad debe ser suficiente para cubrir toda el área del azulejo sin que se derrame, pero tampoco debe ser excesiva.

Verifica la cobertura del adhesivo: Al colocar el azulejo, asegúrate de que haya una buena cobertura de adhesivo en su reverso. Si es necesario, aplica más adhesivo en áreas donde falte.

5. No verificar el nivel de los azulejos

Es fácil dejarse llevar por la apariencia del trabajo mientras se instala la cerámica, pero no verificar constantemente si los azulejos están nivelados puede generar una instalación desigual. Esto no solo es estéticamente desagradable, sino que también puede afectar la estabilidad del material.

¿Cómo evitarlo?

Usa un nivel: Asegúrate de verificar con frecuencia si los azulejos están alineados utilizando un nivel. También puedes usar una cuerda o una línea de tiza para asegurarte de que los azulejos queden alineados de manera recta.

Ajusta según sea necesario: Si encuentras que un azulejo no está nivelado, ajusta su posición mientras aún está húmedo antes de que el adhesivo se seque por completo.

6. No cortar correctamente los azulejos

A veces, los azulejos deben ser cortados para ajustarse a espacios pequeños, como los bordes de una pared o alrededor de accesorios. Si los cortes no se realizan de manera precisa, los bordes pueden verse irregulares o dañados.

¿Cómo evitarlo?

Usa herramientas adecuadas: Para cortar los azulejos correctamente, utiliza una cortadora de cerámica o una sierra de agua. Asegúrate de medir y marcar los cortes de manera precisa antes de hacerlo.

Haz cortes limpios: Si es necesario, lija los bordes de los azulejos después de cortarlos para evitar bordes afilados o irregulares.

7. No dejar que el adhesivo se cure adecuadamente

Una vez que los azulejos están instalados, es importante dejar que el adhesivo se cure correctamente antes de aplicar presión o caminar sobre ellos. Si no se permite el tiempo adecuado para el secado, los azulejos podrían moverse o despegarse.

¿Cómo evitarlo?

Deja que cure: Respeta los tiempos de secado indicados en el adhesivo que hayas usado. Por lo general, debes esperar al menos 24 horas antes de caminar sobre los azulejos o aplicar cualquier presión.

Evita la humedad: En áreas como los baños o cocinas, asegúrate de que el espacio esté bien ventilado para evitar que la humedad afecte el proceso de curado.

Conclusión

La instalación de cerámica o azulejos es una tarea que requiere paciencia y precisión. Si bien es posible hacerlo uno mismo, es crucial evitar los errores comunes mencionados para garantizar un resultado duradero y estéticamente atractivo. Si tienes dudas o si el trabajo es más complejo, no dudes en contactar a un profesional para que te ayude a lograr el acabado perfecto.